por primera vez una ciudad.
Recorres mis parques y avenidas,
descubres todas mis maravillas,
aprovechas tu estancia
y me crees extraordinaria,
incluso te planteas
volverme a ver
en otra época
tal vez.
Pero sé que si te quedases
perdería el encanto,
porque todos vamos lejos
pero, cuando nos quedamos,
nadie quiere investigar
los secretos de su hogar,
nadie recorre la distancia
de las ciudades ordinarias.
Y tú te irás cuando te sacies,
en busca de un cambio de aires.
Mar Fresno