Me alumbras las noches
en las que temo, amor,
que entre las tinieblas venga
a asustarme un ladrón.
Te guío en tu camino,
cuando te pierdes, amor,
y guardo tu mano con la mía
para llevarte hasta el sol.
Me abrazas tan fuerte,
si me enfrío, amor,
que viene a mi encuentro,
celoso, tu calor.
Te presto mi hombro,
cuando te enfadas, amor,
porque tu furia se enfría
si a tu lado estoy yo.
Besas mi frente,
cuando te lo pido, amor,
y me miras tan profundo
que ves mi corazón.
Mar Fresno