domingo, 30 de marzo de 2014

Pase lo que pase

   "De lo poco de vida que me resta
diera con gusto los mejores años
por saber lo que a otros
de mí has hablado. 
    Y esta vida mortal y de la eterna
lo que me toque, si me toca algo,
por saber lo que a solas
de mí has pensado"
He pensado mucho en ti, lo suficiente para avergonzarme, seré sincera. Pienso en lo que pasó y lo que no, en lo poco que tengo sin ti. En todo lo que puede pensar una niña enamorada.
Pienso y a veces lloro, pero solo un poco. Pienso en ti al escuchar cantar a mi roquero favorito y pienso en nosotros cuando te veo en fotos. En nuestros paseos, nuestras risas, nuestras cervezas y nuestras noches. Alguna vez he vuelto a leer tus cartas para recordar y no sé cuándo empezaste a olvidarme. Pienso mucho, demasiado, pero es en ti al fin y al cabo.
Hablo de ti, mucho también. Creo que te guardo dentro y sales cuando te recuerdo, sin que pueda pararte. Hablo de ti a los que te conocen y te doy a conocer a los que no. Cuando empiezo a hablar de ti siempre miro al suelo, luego alzo la cabeza y al final siempre me río entre un suspiro. No estoy muy segura de qué digo, si fuese por mí me pasaría los días mencionándote.
Me cambiaste tanto que no me reconozco, perdí todos mis complejos cuando me miraste de aquella forma que tanto me gustaba y no los he vuelto a ver.
Sé que aunque no vuelva a verte, aunque no me pidas que vuelva a tu lado, aunque me case con otro, siempre serás el amor de mi vida. Y eso no lo cambio por nada del mundo. 
Mar Fresno

domingo, 23 de marzo de 2014

"¿Qué es poesía? Poesía eres tú"

Siempre que voy a escribir me pinto los labios. Puede que sea mi forma de inspiración, os parecerá una locura. Me pongo mi pintalabios favorito, ese que tengo de color rojo vivo. A mí me encanta, aunque nieguen que me quede bien, me da esa clase que no consigo alcanzar. Porque todo lo bueno lo tengo dentro, cuando intento sacarlo me sale mal, es todo culpa de mi boca, que no sabe hablar. Si no puede decir lo que siento, que esté bonita, ¿no?

Al menos sé escribir, y me encanta. Mejor expresarse escribiendo que no expresarse sin más, no me quejo.

Siempre que pienso en qué escribir, me toco el labio. Acabo con los dedos rojos, supongo que también quieren tener esa clase que no pueden alcanzar. Leo a tantos artistas, a tantos genios, que pienso que no debería perder ni un segundo. Debo trabajar y trabajar hasta que sea capaz de componer los poemas más increíbles que puedan salir de mí. Componer poemas, ese es mi sueño.
Y llevar a cabo la huelga gramatical, pero aún soy muy cobarde para eso.

Mar Fresno

miércoles, 19 de marzo de 2014

Te bailaré

Ayer me pillaron bailando mis sueños, no era ningún tango ni un vals siquiera. Era él.
Es pesimista, sí, pero luchador. Sabe lo que quiere aunque no sepa que lo sabe. Es el baile que improvisa su propia existencia. Es un baile tan espontáneo que la música se ve obligada a adaptarse a él. A mí me encanta bailarle. 
Hace de cada paso algo suyo y consigue que todo suene mejor de lo que verdaderamente es. Él es el baile, no el bailarín, por eso le gustaría poder bailar como hacen con él. Es prueba de que puedes saber sin hacer, a eso se dedica.
Mueven los brazos con su presencia y consigue que los corazones de los bailarines latan al mismo tiempo que el suyo, que su ritmo. Mueve sin moverse, porque inspira sin pensar.
Pero de tantos buenos, malos hay, y este chico también consigue que toda desgracia suene peor. Hace que las espinas parezcan más grandes que la flor. Puede dejarte sin argumentos, sin formas de cambiar su opinión. Puede hacerte llorar y puede hacerte caer.
Pone a prueba mi optimismo y por eso es mi baile favorito.
Mar Fresno

lunes, 10 de marzo de 2014

Ortografía consentida

Para mí no son un reto las faltas de ortografía, las he atrapado todas. Cuando era más pequeña, cuando escribía "haber" sin hache y con uve, ahí sí estaba bastante perdida. Saber cómo se escriben las palabras es digno de admiración.

Cada vez que me enfrento cara a cara con una palabra nueva, una palabra que no sé cómo se escribe, eso sí que es tortura. Hacia mí no, hacia la palabra. Se ve transformada y transformada mientras me dice a gritos cómo es. Yo no la escucho, aún no consigo comunicarme con las palabras, pero lo conseguiré. Escribiré una palabra y ella me dará las gracias, por darle una vida más. Creamos más palabras de las que destruimos, realmente somos los dioses de las palabras. Las dominamos, son nuestras y podemos hacer lo que queramos con ellas, nos deben su vida. La diferencia es que ellas nos hablan a nosotros, y nosotros no nos enteramos. 

Algunos genios sí se enteran cuando las palabras chillan, cuando exigen un cambio. Cuando están hartas de que las escriban mal y quieren cambiar solo para ser bien escritas siempre. Son unas lloricas. Entonces les dan permiso para que cambien, y cambian.
Nosotros seguimos queriendo huelga, no podemos encaprichar a las palabras. Al final la envidia hará que cambien todas. Aún faltan miembros para llevar a cabo una buena manifestación, quedan muchas plazas libres, ¡Ánimo! 

Mar Fresno 

sábado, 8 de marzo de 2014

Me encanta tu mirada, pero no me mires así.

Para mí lo eres todo, pero creo que va a ser mejor que te vayas. Me haces feliz, pero últimamente me cuesta sonreír. Te necesito a mi lado, pero no solo a mi lado, dame conversación al menos, ya sabes. Luego hablamos, que tengo asuntos pendientes.

Me han contado que me quieres, que no cambiarías ni un solo rincón de mi cuerpo y que harías lo que sea por entender todo lo que traigo en mis pensamientos. Dicen que te voy a tener, que vas a ser mío, dicen pero mienten. Porque no solo tus ojos tienen derecho a elegir. ¿Qué le pasó a tu cabeza? Esa que estaba hasta arriba de historias que contar. Parece que se va, que la pierdes, porque sabe lo que quiere tener, pero tú no quieres tenerlo, al menos no todavía.

Cambiaré, para estar contigo, para que podamos ser felices juntos. Bueno, realmente ya nos tocará ser felices algún día, ¿No? Dale tiempo, disfrutemos de nuestra presencia sin tener que tomar decisiones, por ahora. Parece que todo lo que haces lo haces pensando en el futuro. Cálmate, que todo llega, no pierdas el tiempo en preocuparte. Confía en mí, va a ser mejor. ¿Estás loca? ¿Qué haces confiando en mí? Sabes de sobra que no deberías, que solo te voy a hacer daño, no seas tonta.
Pero vamos a ver, parece que no lo entiendes. Yo puedo quererte, y te quiero, pero no me quieras, por favor. Es simple, pero espera, que si no me quieres te echo. Te echo de mi vida y no vuelves a entrar, de verdad te lo digo. Mira, yo te espero, pero continúa andando, no puedo seguir un ritmo tan lento. Intenta seguirme a mí al menos, que no muerdo.

Te quiero, pero odio cuando te pones así.

Deja de mezclar sentimientos de una vez.
"Odio cuando me haces reír y aún más cuando me haces llorar"
Mar Fresno